Dos niños con orejas de reno, una niña mayor y una bebé, acostados en una cama de pañuelo beige con ropa a juego con estampado de flores blancas, sonriendo y descansando. La niña mayor está sonriendo ampliamente, mostrando sus dientes y levantando las manos detrás de su cabeza.

C’est Parti nació en casa, entre pañales, risas desveladas y ese caos hermoso que convierte a dos personas en familia, no fue una idea de negocios — fue una necesidad.

Tuvimos la fortuna de vivir la paternidad fuera de México y esa experiencia nos abrió los ojos: descubrimos que las cosas para niños no tienen por qué ser de baja calidad, ni aburridas, ni frágiles, ni pasajeras.

Vimos productos pensados para crecer con los hijos, diseñados para durar, para facilitar la vida familiar, para conectar, no solo entretener y entendimos algo poderoso: una buena experiencia en familia se vuelve más simple cuando los objetos están creados con propósito.

Queríamos traer eso a casa.
Queríamos compartirlo.

Entre cafés fríos y juguetes en el piso, fue tomando forma una visión clara: ser papás es improvisar, aprender, reír y repetir — y el mundo necesita tiendas que acompañen ese proceso con cosas bien hechas, seguras y hermosas.

Menos cosas, pero mejores. Menos plástico sin sentido, más diseño con intención. Menos ruido, más momentos.

Un reloj despertador dorado, una cesta con luces de cadenas, una bola de nieve con figuras de un niño y un perro, y algunos papeles y cinta en una mesa de madera.

No cualquier Cosa

Cada producto que elegimos pasa por el mismo filtro:

  • ¿lo usaríamos en casa? ¿es seguro para nuestros hijos?

  • ¿les aporta más que entretenimiento — les despierta curiosidad, calma, imaginación?

  • ¿hace la vida diaria más fácil, más dulce, más nuestra?

C’est Parti no es solo una tienda:

  • Es un reflejo de lo que vivimos, lo que aprendimos y lo que soñamos como familia.

  • Es una invitación a disfrutar el camino y a crecer juntos — con calidad, con intención, con amor.

Hombre con barba sosteniendo a un bebé envuelto en un portabebés, mientras un niño pequeño le jala la ropa y los mira con alegría en un interior hogareño.

  • • Que la infancia merece calidad, diseño y respeto.
    • Que menos es más cuando se elige con corazón.
    • Que un producto bien pensado facilita la vida y amplifica los momentos.
    • Que ser papás no trae manual, pero sí compañía.
    • Que crecer es una aventura — y nadie debe hacerlo solo.• Que la infancia merece calidad, diseño y respeto.
    • Que menos es más cuando se elige con corazón.
    • Que un producto bien pensado facilita la vida y amplifica los momentos.
    • Que ser papás no trae manual, pero sí compañía.
    • Que crecer es una aventura — y nadie debe hacerlo solo.

  • No vendemos por vender.
    Traemos solo lo que usaríamos con nuestros hijos.
    Productos con propósito, belleza y sentido.

    C’est Parti es nuestra historia hecha tienda.
    Ahora también puede ser parte de la tuya.

Suscríbete

Suscríbete